Área: Sujetos, identidades y culturas
Palabras claves: Cuerpo, Sociedad de Consumo, Subjetividad
Autoras: Agustina Gálligo Wetzel y Ana Lucía Centeno
Pertenencia institucional: Universidad de la Cuenca del Plata y Universidad de Buenos
Aires
Contacto: [email protected]; [email protected]
En el cuerpo, entendido con la dimensión en la que se inscriben y reflejan las prácticas sociales, se encarnan las señales del biopoder; en términos de Michel Foucault, es la instancia en la cual la circulación del poder institucionalizado deja sus marcas. Los cuerpos del capitalismo tardío son pura imagen, apelan al sentido visual, y son el resultado de una biopolítica en la cual el mercado y la técnica comienzan a ganar espacio. En el siguiente trabajo nos preguntamos sobre los afectos y efectos de la actual sociedad de consumo, sobre la forma en la que el sentido construido genera una sensibilidad desde la cual se promueven y ponen en marcha determinadas categorías estéticas, y como consecuencia, nuevos mecanismos de inclusión y exclusión. En este camino, el ensayista Jonathan Crary nos permite dilucidar que en el actual modelo social se asimila un exceso en constante expansión de servicios, imágenes, procedimientos y productos químicos, debido al surgimiento del carácter ininterrumpido de las necesidades así como también su consecuente insatisfacción perpetua. A la subjetividad de la Modernidad le suceden una espacialidad y temporalidad diferentes que demanda la movilización permanente de los sujetos en un espacio sustancialmente de consumo. Esto nos lleva a preguntarnos cómo se reconfigura la suavidad de los cuerpos, entendida ésta como esa superficie que establece el límite entre el sujeto y el mundo exterior; cómo se establecen y en qué consisten los nuevos límites de las construcciones imaginarias y de identidad.